lunes, 7 de abril de 2014

Era curiosa.

Era un chica curiosa....

De esas que ante la supuesta e impuesta crisis obligatoria de los 30, en vez de plantearse su vida de un modo autocrítico y masoca, se sintió como una “mujer de 20 años con un plus de diez de experiencia”...

De esas que no coleccionaba amor, que no procesaba la posibilidad de enamorarse repetidamente en plazos cortos, eso lo reservaba como los buenos vinos, para ocasiones especiales...

De esas a las que no les gustaba manipular con jugadas para conseguir que el fin de la partida tornase a su favor...

De esas que por mucho que no estuviera preparada para muchas cosas, que por mucho que supiera que no era el momento para vivir ciertas aventuras... Siempre apostaba por lo que le hacía sonreir, por lo que le hacía sentir... “Arrepiéntete de lo hecho,nunca de lo que no tuviste valor de hacer”...

De esas que toman la sinceridad como su estandarte, no dando rodeos, ni midiendo sus palabras, a pesar de saber que el fallo radicaba ahí...

De esas que no entendía como alguien que se cuela en tu vida, en la rutina de tus días, despelleja esa situación mimada sin pestañear ni por un segundo...

Era curiosa.
Su teoría y su práctica eran gemelas. No exponía lo que no cumplía.

Sus fallos se contaba por millares, sus virtudes con los dedos de las manos.

Tenía mucha suerte de su entorno, de lo que le querían, de lo que le mimaban, de que incluso los que formaban parte de sus compañeros temporales despues del tiempo le regalaran palabras convencidas de que ella se merecía mucho, a pesar de creerse poco.

Durante los últimos años se había reconvertido, creando un “yo” que no tenía nada que ver con el conocido... Forjandose en transparente, en cínica, en alguien que sabía que las realidades son caducas.

Siempre decía que a ella “había que quererla a pesar de lo que era, no por lo que era”..Y lo cierto es que ,por el momento, así era.

En instantes puntuales del camino, alguien había conseguido que su hielo,ese que ella misma cinceló dándole forma, se convirtiera en escarcha.. Nunca nadie lo había derretido desde que ella decidió tornar su calidez en un grueso escupo de frío, pero si lo habían debilitado temporalmente volviéndolo más fino, más frágil.

Eso había sucedido pocas veces, era cierto... Y cada vez que el deshielo relativo terminaba, ella sumaba a sus paredes el doble del grosor que antes existía.

Algo había sucedido sin razones... En el momento, de la forma más ilógica,menos racional... Con lo racional que era ella!!.

Había algo de si misma que le gustaba mucho... Como buen ser más que organizado, se marcaba tiempos y pautas..Y ya había marcado en el calendario de su experiencia presente todas las marcas que eran necesarias. Hasta ahí existía el TODO, el es UNA MUJER DE LAS QUE..A partir de ahí asumía, forjaba y cerraba los ojos.

"Porque las cosas que no son hoy pueden esperar ... Pero si lo vas a hacer cuidalas para que el día que las quieras, estén intactas".