sábado, 15 de mayo de 2010

Apostando sin ganar...


Apostando al rojo, sin que salga nunca. Deseando que salga impar mientras el estómago se encoge esperando el resultado de su apuesta.
Cada latido de su corazón, bombea sangre por una sola persona…siempre anteponiendo los deseos ajenos a los propios. Dejando de pensar en lo que es bueno para ella, supeditando sus sueños al humor de quien la acompaña a ratos.
El tiempo pasa mirando hacia atrás de reojo, viendo que nada se ha cumplido, que los sueños de hace tiempo eran papeles que se habian roto y se los habia llevado el aire…
Sintiendo que ese tiempo ha sido subastado, al igual que sus sueños, a cambio de lo que otro quisiera.
Todo eso no la importaba, hasta el momento en que vió que nadie hacia lo mismo por ella. En ese mismo instante se percato de lo vacio de su decision. Una decision que en principio la hizo sentir feliz,pero todo cambió y se diluyo en el mundo de la realidad.

Porque siempre sale negro y par, por eso mismo, el cambio llega para desgracia de quien no  ha cuidado suficientemente, y para bien de quien se ha cansado de estar hipotecada.

1 comentario:

  1. Una vez alguien me dijo: "Nunca está tan nublado como cuando va a amanecer."

    Espero que cambie la suerte de la persona protagonista de tu texto, y que deje de salir "Negro y par".

    Sí es cierto que a veces se desea dar un cambio radical y empezar un rumbo nuevo, pero también es verdad que las cosas pueden cambiar por sí solas y sorprender.

    Muchos besos.

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