lunes, 8 de marzo de 2010

LA ESPADA DE DAMOCLES


Pendiente de lo que pende de un hilo, de lo que no podemos controlar por mucho que intentemos, de las cosas que por mucho que racionalicemos no tienen sentido logico…

Las grandes cosas, las que mueven el mundo , muchas veces son espasmos involuntarios, caprichos de un ente desconocido para nuestros sentidos, movimientos de un planeta que rota de forma ciclica.

La espada de Damocles pende sobre nuestras cabezas mientras vivimos lo que nos ha tocado de forma privilegiada, un reparto sin sentido que ha conseguido que seamos lo que somos desde la comodidad de nuestras casas, mirando hacia otro lado cada vez que la realidad intenta golpearnos.

Los segundos pasan desde la tranquilidad del desarrollo, sin percatarnos de lo que pasa a nuestro alrededor, o mejor dicho cambiando la vista de lugar cuando lo que vemos no es un un paisaje lleno de belleza.

La espada de Damocles pende sobre nuestras conciencias, sin que a nadie le revuelva las entrañas el saber que existe “ese todo” que nos vuelve ciegos selectivos.

1 comentario:

  1. Muuuuuy bien escrito. Un vocabulario muy rico.
    En cuanto al contenido... qué quieres que te diga. Te doy la razón. Lo fácil es apartar la mirada y hacer como si no se ve nada.
    Un besito.

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